Gramsci lo expresa claramente cuando habla de la educación clerical italiana, “el producto {educación} vale poco en Italia, a pesar de lo que cuesta. Lo que vale es el producto {título}, que en cambio cuesta muy poco (…). El estado (…) siempre está dispuesto a comprar títulos de estudio, pero pretende que sean expedidos por una de sus instituciones acreditadas”.Sigue leyendo

Si ellos lograron seguir en sus cargos, salir nuevamente reelectos, incluso llegar a ser presidente, y por contraste, la sociedad se quedó sin soluciones a las demandas sociales, con muertos, presos, torturados y con un proceso constituyente que no dejó nada resuelto, sin duda y como lo explica la historia, nuevamente los vencedores fueron vencidos.Sigue leyendo